Ya está disponible el nuvo informe de Riesgos Globales 2025

Riesgos Globales


Desde el Foro Económico Mundial publicó el anterior Informe 2024 de Riesgos Globales, las fuerzas estructurales como la aceleración tecnológica, los cambios geoestratégicos, el cambio climático y la bifurcación demográfica y sus interacciones, que abordan la polarización social y sus impactos en el desarrollo global, han continuado su avance. Los riesgos resultantes se están volviendo más complejos y urgentes, y acentúan un cambio de paradigma en el orden mundial, caracterizado por una mayor inestabilidad, narrativas polarizadas, erosión de la confianza e inseguridad.

Esto ocurre en un contexto en el que los marcos de gobernanza actuales parecen insuficientemente preparados para abordar los riesgos globales, tanto los conocidos como los emergentes, o para contrarrestar las fragilidades que estos generan.  

Echando la vista atrás, a lo largo de las últimas dos décadas, los riesgos ambientales se han consolidado como la mayor fuente de preocupación a largo plazo, pero la Encuesta de Percepción de Riesgos Globales de este año muestra que la alarma también está aumentando a corto plazo: los problemas ambientales, desde las condiciones climáticas extremas hasta la contaminación, son una realidad y la necesidad de implementar soluciones es sentida como  urgente.  

La preocupación por los conflictos armados estatales y la confrontación geoeconómica se ha mantenido, en promedio, relativamente alta durante los últimos 20 años, con cierta variabilidad. Hoy en día, el riesgo geopolítico, y en concreto la percepción de que los conflictos podrían agravarse o extenderse, encabeza la lista de preocupaciones a corto plazo. 

El miedo y la incertidumbre ensombrecen el panorama en diversas partes del mundo, como Ucrania, Oriente Medio y Sudán, donde las instituciones multilaterales luchan por ofrecer una mediación eficaz y trabajar para encontrar soluciones.  

Los riesgos sociales, como la desigualdad, ocupan un lugar destacado entre las principales preocupaciones actuales y de los últimos años.  

La polarización dentro de las sociedades está endureciendo aún más las perspectivas y afectando la formulación de políticas.  

También continúa avivando la desinformación, que, por segundo año consecutivo, es la principal preocupación a corto y mediano plazo en todas las categorías de riesgo. Los esfuerzos para combatir este riesgo se enfrentan a un formidable oponente: el contenido falso o engañoso creado por IA generativa, que puede producirse y distribuirse a gran escala. 

En términos más generales, los riesgos tecnológicos, si bien no se consideran inmediatos, aumentan en la clasificación a 10 años vista, dado el rápido ritmo de cambio en áreas como la IA y la biotecnología. 

Los riesgos económicos han disminuido en la clasificación desde el año pasado, ya que la inflación y el riesgo de una recesión económica ya no son una prioridad para los responsables de la toma de decisiones y los expertos. Pero no hay lugar para la complacencia: si en los próximos meses se produce una espiral de aranceles y otras medidas restrictivas del comercio a nivel mundial, las consecuencias económicas podrían ser significativas. Las elevadas valoraciones de varias clases de activos las hacen más vulnerables a estos y otros riesgos. 

En el informe, se profundiza en temas clave de riesgo global: conflictos, guerras comerciales, tecnología y polarización como principales preocupaciones a corto y mediano plazo, así como la contaminación, la biotecnología y el sobreenvejecimiento, como áreas donde podrían manifestarse graves riesgos a largo plazo.  

También ofrece una visión retrospectiva de las últimas dos décadas de evaluación de riesgos globales. Hace veinte años, en el primer Informe de Riesgos Globales, el mundo estaba en una situación diferente. Los riesgos que se han gestionado y mitigado adecuadamente desde entonces fueron aquellos en los que los esfuerzos concertados y colectivos de líderes de múltiples partes interesadas ayudaron a construir puntos en común, compromisos y soluciones mutuamente aceptables.

Ahora dependerá de líderes visionarios involucrar a todas las partes interesadas clave para abordar los riesgos previstos para la próxima década y construir una paz y una prosperidad duraderas. 

El informe destaca los últimos hallazgos de la Encuesta Anual de Percepción de Riesgos Globales, que este año reunió la información colectiva de más de 900 líderes globales del mundo académico, empresarial, gubernamental, de organizaciones internacionales y de la sociedad civil.  

También aprovecha las perspectivas de unos 100 expertos temáticos, incluyendo a los especialistas en riesgos que conforman el Consejo Asesor del Informe de Riesgos Globales, el Consejo Futuro Global sobre Riesgos Complejos y la Comunidad de Directores de Riesgos.  

El mundo ha cambiado profundamente en los últimos 20 años y seguirá haciéndolo de forma impredecible. Sin embargo, la previsión basada en opiniones informadas de expertos sigue siendo fundamental para una mejor planificación y preparación, tanto a corto como a largo plazo. 

El 20.º Informe de Riesgos Globales continúa arrojando luz sobre riesgos relevantes a nivel mundial, que a menudo son complejos y, en ocasiones, alarmantes. Sin embargo, al examinar la trayectoria de los riesgos previstos en las últimas dos décadas, es evidente que no existe una alternativa viable a las soluciones multilaterales en el futuro.  

Líderes de los sectores público y privado, la sociedad civil, la comunidad internacional, las organizaciones internacionales y el mundo académico deben tomar la iniciativa y colaborar de forma abierta y constructiva. Al profundizar el diálogo honesto y actuar con urgencia para mitigar los riesgos que se avecinan, podemos reconstruir la confianza y, juntos, crear economías y sociedades más fuertes y resilientes. 

Fuente: World Economic Forum 

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